ORACIÓN
DE LA
MISERICORDIA DIVINA
¡Oh Dios de
gran misericordia!, bondad infinita, desde el abismo de su abatimiento, toda la
humanidad implora hoy Tu misericordia, Tu compasión, ¡Oh Dios!; y clama con la
potente voz de la desdicha.
¡Dios de
Benevolencia, no desoigas la oración de este exilio terrenal! ¡Oh señor!,
Bondad que escapa nuestra comprensión, que conoces nuestra miseria a fondo y
sabes que con nuestras fuerzas no podemos elevarnos a Ti, Te lo imploramos:
Adelante con Tu gracia y continúa aumentando Tu misericordia en nosotros, para
que podamos, fielmente, cumplir Tu santa voluntad, a lo largo de nuestra vida y
a la hora de la muerte. Que la omnipotencia de tu misericordia nos escude de
las flechas que arrojan los enemigos de nuestra salvación, para que con
confianza, como hijos Tuyos, aguardemos la última venida (día que Tú solo
sabes). Y esperamos obtener lo que Jesús nos prometió a pesar de nuestra
mezquindad.
Porque
Jesús es nuestra esperanza: Através de su Corazón misericordioso, como en el
Reino de los Cielos.
ORACIÓN
Oh Dios,
cuya Misericordia es infinita y cuyos tesoros de compasión no tienen límites,
míranos con Tu favor y aumenta Tu Misericordia dentro de nosotros, para que en
nuestras grandes ansiedades no desesperemos, sino que siempre, con gran
confianza, nos conformemos con Tu Santa Voluntad, la cual es idéntica con Tu
Misericordia, por Nuestro Señor Jesucristo, Rey de Misericordia, quien con Vos
y el Espíritu Santo manifiesta Misericordia hacia nosotros por siempre. Amén.
JACULATORIA
El Salvador
ordenó a Sor María Faustina que escribiera, y la rezara con frecuencia, esta
pequeña jaculatoria:
"Oh
Sangre y Agua, que brotasteis del Sagrado Corazón de Jesús como una Fuente de
Misericordia para nosotros, yo confío en vos".
ORACIONES
BREVES
PARA REZAR
A LAS TRES DE LA TARDE
1
Expiraste,
Jesús, pero Tu muerte hizo brotar un manantial de vida para las almas y el
océano de Tu misericordia inundó todo el mundo. Oh, Fuente de Vida, insondable
misericordia divina, anega el mundo entero derramando sobre nosotros hasta Tu
última gota de sangre. (IV, 59).
2
Oh, Sangre
y Agua que brotaste del Corazón de Jesús, manantial de misericordia para
nosotros, en Ti confío. (1, 35).
Si te
ha gustado esta ORACION, siéntete LIBRE de hacer clik en ME GUSTA y de
compartirlo en FACEBOOK, TWITTER, CORREO ELECTRÓNICO y demás redes
sociales.

No hay comentarios:
Publicar un comentario