Santísima
virgen y Madre;
cuya alma
fue atravesada
por una
espada de dolor
en la Pasión de tu divino Hijo,
quien en su
gloriosa Resurrección
fue lleno de un gozo eterno en Su triunfo;
Excelsa
Madre,
acudo ante
ti,
para pedir
justicia.
Llevo
tiempo sufriendo mucho
por las
infidelidades de mi pareja
y me siento
humillado (a) y
dolorido (a) como tu lo fuiste.
Bendita
Madre de Dios,
ruega a tu
Santo Hijo por mi
e intercede
por una resolución a mi favor,
si lo crees
justo, y para mayor gloria Tuya.
No acudo a
ti para pedir venganza,
acudo a
pedir justicia divina,
y para no
salir más perjudicado (a)
de esta
situación por la que atravieso,
pues con el
dolor recibido,
creo que ya
ha sido suficiente.
Te pido
también por las personas
que
atraviesan por mi misma situación,
obtén para
los que te invocamos
que seamos
hallados dignos
y
obtengamos la consolación
por la que
oramos,
en la
caridad y la paz del mismo Cristo,
Nuestro
Señor.
Destierra
de nuestras vidas
la
humillación, la angustia, el dolor,
y
permítenos empezar de nuevo,
dignos de
una amor gratificante,
sano, fiel,
feliz,
como
merecemos.
Por el
inmenso que tu sufriste,
ruega por
nosotros,
que aunque
sin jamás poder con el tuyo,
también estamos sufriendo.
Amén.

No hay comentarios:
Publicar un comentario